Add parallel Print Page Options

13 ¡Que te libren tus ídolos cuando clames!,
pero a todos ellos se los llevará el viento,
un soplo los arrebatará;
mas el que en mí confía tendrá la tierra por heredad
y poseerá mi santo monte.
14 Y dirá: “¡Allanad, allanad; barred el camino,
quitad los tropiezos del camino de mi pueblo!”»

15 Porque así dijo el Alto y Sublime,
el que habita la eternidad
y cuyo nombre es el Santo:
«Yo habito en la altura y la santidad,
pero habito también con el quebrantado y humilde de espíritu,
para reavivar el espíritu de los humildes
y para vivificar el corazón de los quebrantados.

Read full chapter